Fue la primera obra completa que detallaba el aspecto de todas las trufas que se podían hallar en el subsuelo italiano. Russeau decía ser poseedor de un método infalible y empezó a plantar árboles susceptibles de producir trufa negra en 1855. Años más tarde se verificó que su método era realmente eficaz ya que en 1870 sus resultados eran espectaculares. El método de Russeau se basaba en las experiencias y descubrimientos del agricultor, que en 1802, consiguió en Saint Saturnin obtener trufa negra por primera vez de forma accidental. Todas las otras zonas de Francia que producían trufa, de forma silvestre, se interesaron por este método y vieron en él, el modo de obtener trufa a través de cultivos realizados por la mano del hombre. En principio, no existe una raza determinada para la caza de la trufa, pero últimamente sí que se suelen utilizar a menudo los perros de agua y los labradores retriever. Al igual que en el caso de la trufa blanca de Alba o trufa blanca italiana, la trufa negra necesita una específica composición de terreno, que es lo que permite que exista realmente dicho tubérculo. Gastronómicamente, la trufa blanca italiana goza de más prestigio que la trufa negra del Périgord francés.
La Trufa blanca es más un sabor en la cocina que un ingrediente. El jugo sirve como condimento y acompaña a la trufa para reforzar el sabor. Es la base de cualquier salsa trufada y se añade como condimento a una gran variedad de platos que precisan del sabor de la trufa negra. Para empezar a adiestrarlo, primero hay que enseñarle las órdenes básicas, sobre todo la de que acuda a tu llamada. Conozcamos un poco más sobre nuestro producto gourmet. La altitud debe estar entre 350 y 1100 metros sobre el nivel del mar. La profesionalización del cultivo de esta trufa en nuestro país ha sido todo un éxito, logrando situar a España como el país máximo productor de trufa negra del mundo. Entre los conceptos claves destacan: la bellota o simiente como pieza principal, las esporas de trufa negra y un terreno con características determinadas. A partir del siglo XX, se han descubierto otros conceptos muy importantes para su correcto cultivo, entre los que destaca la esterilización de la tierra dónde se plantará la semilla portadora de esporas de trufa y la selección del terreno de destino, en base a una estricta analítica.
Bueno, tú métete en lo que te importe. En cuanto a la elección del tipo de terreno, tal vez uno de los aspectos más importantes, podemos tomar como ejemplo o modelo a seguir, las tierras que producen de forma natural la denominada trufa salvaje. 2. Todo el proceso anterior del derretido del chocolate con la nata y mantequilla lo podemos hacer también en el microondas a mitad de potencia el tiempo que sea necesario. La trufa es un hongo con la particularidad que su desarrollo se produce bajo tierra, junto a la raíz de ciertos árboles, roble y encina fundamentalmente, conviviendo con ellos en una perfecta simbiosis, de ahí que se le conozca como hongo hipogeo. Aquella ocupación le parecía muy agradable, algo así como un descanso de su espíritu y una especie de juego a su gusto; un juego que, además de los goces del juego, procura el entretenimiento de manejar las cartas. Paralelamente a estos hechos, en la región de la Provence, en Francia, a principios del S.XIX, un agricultor, de la localidad de Saint Saturnin, sembró bellotas para poblar sus tierras de encinas. De forma secreta adquirió los terrenos próximos y repitió el proceso sembrando las mismas bellotas que producían las encinas que también producían trufas.
Cada año me pregunto por qué no hago trufas negras melanosporum frescas más a menudo, y me doy cuenta de que es demasiado fácil caer en la tentación de ir catando la masa en el proceso. Ningún ingrediente más. La cocción se realiza a baja temperatura, y durante este proceso la trufa libera jugo perdiendo peso. Este jugo se envasa directamente sin ningún aditivo, resultando un producto 100% natural. 4. Los perros truferos adiestrados logran ser capaces de localizar este hongo aún en las peores condiciones, aunque el terreno se encuentre cubierto de una capa de nieve de varios centímetros de espesor. En primera instancia, este proceso debe efectuarse en una maceta de pequeñas dimensiones, hasta que la planta asuma el tamaño suficiente para colocarla a demora en el terreno definitivo. Las zonas productoras de trufa deben ser soleadas y aireadas, pero no deben sufrir un exceso de viento, ya que esto contribuiría a evaporar rápidamente la humedad del terreno. Los resultados fueron siempre negativos, ya que realmente se desconocían los exactos mecanismos y condiciones que se requieren para la producción del perseguido Tuber Melanosporum. Estamos tan ocupados en sofisticar nuestro corazón, hemos abusado tanto del microscopio para estudiar las repugnantes excrecencias y las vergonzosas verrugas que lo cubren, y que nosotros exageramos a gusto, que es imposible que hablemos el lenguaje de los otros hombres.